Fig. 5. Pirámide del SIDA. Las manifestaciones clínicas de los pacientes infectados por el VIH dependen de la cantidad de virus que se producen en su cuerpo. Esto se refleja sólo parcialmente en el número de linfocitos T4. La depleción de células T cooperadoras se relaciona con las manifestaciones clínicas progresivas de disfunción de las células T (SE Thompson).

 

 

Fig. 6. Esquema de los cambios apreciados en la sintomatología clínica, contaje de linfocitos CD4 y de los niveles de antígeno p24 (virus) durante el desarrollo de la infección por el VIH.

 

 

Fig. 7. Riesgo de aparición de las principales infecciones oportunistas en función del número de linfocitos CD4+.

   

[Regresar]